El gigante de los supermercados Walmart es número uno en el máximo
mercado del planeta, Estados Unidos, y tiene sucursales en 26 países con
más de 800.000 empleados y 6.000 tiendas, pero su operación está
afrontando dificultades en China.
Tras 18 años en el país, la empresa reconoció este año que China era uno de los mercados con peor desempeño.
El despido de unos 250 empleados y unos 30 ejecutivos para reestructurar la dirección no parecen haber arreglado las cosas.
Una investigación publicada en diciembre por la agencia de noticias
económicas Bloomberg reveló lo que describe como cuestionables prácticas
contables en que la compañía habría incurrido en años recientes para
cumplir con las metas de venta.
Según John Ross, economista senior del Instituto Chongyang de
la Universidad Renmin de Pekín, el problema de Walmart es el de muchos
minoristas occidentales que operan en el país.
“Están usando el mismo modelo de su país de origen sin darse cuenta
que tienen que adaptarlo. Asumen que China es un país con una gigantesca
clase media que pronto va a ser igual que en sus países y no se dan
cuenta de las características propias del mercado chino”, señaló a BBC
Mundo.
Dos ejemplos
En 2011 dos exitosas firmas estadounidenses – Home Depot and Best Buy
– cerraron sus operaciones en China a seis años de abrir sus puertas
con un fracaso que sorprendió a muchos analistas occidentales.
Home Depot es la compañía más importante de Estados Unidos para el
mejoramiento del hogar, bricolaje y materiales de construcción.
Con el boom inmobiliario chino de este siglo y las
características del mercado local – la mayoría de las propiedades en
China se venden absolutamente vacías, es decir, sin enchufes, cables,
ventanas, puertas, etc – parecía una aventura comercial con un éxito
asegurado.
Por su parte, Best Buy, especializado en productos electrónicos,
había apostado a la nueva franja de consumidores medios-altos chinos,
pero seis años más tarde solo dominaba un 1% del mercado.
“Es que la estructura de costos en China es totalmente diferente a la occidental. El DIY, es decir, Do It Yourself, hacer
uno mismo ciertas cosas básicas de un hogar, no sirve porque todo se
puede hacer por muy poco dinero con trabajadores locales. Otro rasgo son
los grandes locales en las afueras con grandes playas de
estacionamiento. Esto en China no sirve porque mucha gente no tiene
coche o no puede llegar al lugar”, indicó a BBC Mundo Ross.
Relaciones peligrosas
En el caso específico de Walmart su operación en China comenzó a fines de los 90 con fuegos artificiales.
En una década caracterizada por la euforia pos-muro de Berlín el mensaje de la empresa era optimista y visionario.
La cadena explicaba su apuesta por China, el gran mercado del futuro,
con la palabra que abría y cerraba cualquier discusión económica de la
época: “globalización”.
Este 2014 ha quedado claro que la distancia entre retórica y realidad es gigantesca.
A principios de año, en un país cada vez más obsesionado por la
calidad alimentaria, la empresa tuvo un bochornoso escándalo en el que
uno de los productos que vendía, la carne de burro Five Spice, mostró
rastros de carne de zorro.
En el trimestre que finalizó en octubre reportó una caída de las
ventas del 0,8% que atribuyó a las medidas de austeridad del gobierno y
la “deflación”.
La empresa responde
Los problemas de Walmart no se limitan a la caída de ventas.
Según la investigación de Bloomberg, el funcionamiento interno de la empresa enfrenta irregularidades.
“Estas prácticas que incluyen ventas al por mayor y operaciones
fantasma hicieron que la situación de la empresa pareciera más fuerte de
lo que era incluso cuando las ventas disminuían y el inventorio de
productos no vendidos aumentaba”, señala Bloomberg.
Según le indicó a BBC Mundo la portavoz de asuntos internacionales de
Walmart, Marilee McInnis, la compañía toma seriamente este tipo de
denuncias.
“Cuando nos enteramos de algún problema, incluyendo alegaciones sobre
integridad financiera, actuamos rápidamente para investigar y remediar
el asunto. En 2011 Walmart China reconoció discrepancias en el precio de
los inventarios y luego de una nueva investigación se tomaron una serie
de medidas preventivas, cambios en el liderazgo y acciones
disciplinarias”, indicó a BBC mundo.
De acuerdo a Bloomberg, la compañía está siendo investigada por el
Departamento de Justicia estadounidense y la Securities and Exchange
Commission (SEC), órgano regulador del mercado financiero de ese país,
por posibles violaciones de la ley contra prácticas corruptas en el
extranjero.
En cuanto al futuro en China las señales son contradictorias.
A principios de diciembre, la compañía señaló que eliminará unos 30
tiendas de las alrededor de 400 que tiene en el país, pero que al mismo
tiempo se crearán unos 6.000 nuevos puestos con la apertura de 31
tiendas y centros de distribución.
F: BBC Mundo