Debido
al complicado ambiente que se vive en el estado mexicano de
Michoacán entre las guerrillas de grupos de autodefensa contra el cartel
de Los Caballeros Templarios, el cura Gregorio López hace la misa con un chaleco antibalas debajo de su sotana y también anda con guardaespaldas.
Para
el padre de Apatzingán dice que el momento de violencia que viven
cientos de familias es "grave e indignante" con una constante sicosis y
temor por como operan las bandas.
Ver Video
Según
el padre López, los carteles tienen poder para decidir "quién puede
trabajar para el Gobierno o hasta quién puede cortar limón". "Ellos
controlan todo, aunque las autoridades no lo quieran aceptar", afirmo al
diario El Universal.
Para terminar, el cura
Gregorio López, amenazado por el crimen organizado varias veces debido a
sus declaraciones, le dedicó varias palabras al mandatario de su país: "Le
digo a Enrique Peña Nieto que le beso los pies el día que tenga en la
cárcel a Nazario Moreno, a Enrique Plancarte Solís y a Servando Gómez
Martínez".