Ynmaculada Cruz Hierro
Sus amigos y familiares recuerdan consejos y mejores momentos que vivieron con Yaqui Núñez del Risco
Muchos recuerdos, vivencias y anécdotas
guardan con gratitud amigos y familiares que siempre se nutrieron de las
buenas sapiencias de Yaqui Núñez del Risco. Pedro Núñez del Risco, lo
recuerda con el amor que se recuerda a un hermano querido.
Como
hermano menor de Yaqui, guarda muchas vivencias, pero una que le marcó
sucedió cuando audicionó para asistir a una universidad privada y no
pudo entrar porque llevaba el apellido de Núñez del Risco.
En ese
entonces Yaqui, que residía en Santiago, había sido relacionador público
de la UASD y había enfrentado a profesores recalcitrantes que habían
salido de la universidad estatal y que ingresaron a dar clase a la
universidad privada.
Pedrito contó que cuando Yaqui se enteró, lo
llamó desde Santiago y le dijo que ya tenía todo resuelto para que fuera
a estudiar a México ingeniera industrial. “Yo no quise ir a México,
pero me marcó el don que tenía de solidaridad, porque cuando me llamó
ya era porque tenía resuelto el problema. Ese era Yaqui, una persona
entregada y sumamente solidaria”, expresó Pedrito.
El alcalde de
Santo Domingo, Roberto Salcedo también recordó un momento que agradeció a
Yaqui de por vida. “Cuando hacía un anuncio para la televisión
pronuncié la palabra ¥hubieron¥ y Yaqui me llamó y me dijo: que lo
correcto es hubo. Le agradecí, pero luego me di cuenta que eso que hizo
conmigo, lo hacía con todo el mundo”, recordó Salcedo.
Milagros
Germán reveló que Yaqui siempre le manifestaba que deseaba compartir en
un programa con ella. “Recuerdo que cuando gané Miss Latinoamérica
Yaqui me hizo la primera entrevista en su programa Otra vez con Yaqui.
Siempre innovando llevó las cámaras a mi casa y mostró al público mi
casa, mi cuarto y hasta mi closet. Yaqui me manifestó que se sintió muy
orgulloso de mí, porque durante la entrevista ofrecí un discurso tan
bueno, que la gente dijo que él me lo había escrito”.
Milagros dijo que espera rencontrase con él en el cielo para concretizar el deseo de trabajar junto al maestro.
HOLA NUEVO DÍA
Tiempo de maestro
A la ejemplar Celeste
Hamilton, porque me honra al leerme.
Aunque
los diccionarios registren que profesor es sinónimo de maestro, esa
gran maestra que es la experiencia de la realidad social, la
contemporánea, por ejemplo, enseña que, hoy aquí, no es lo mismo ni es
igual maestro que profesor. Quienes hemos sido premiados por Dios como
testigos de gran parte del siglo XX y lo que va del XXI, podemos decir
que maestros y maestras eran los y las de ayer; hoy, con honrosas
excepciones, hay profesores y profesoras. El maestro, por vocación,
educa, con la enseñanza de las ciencias y la práctica de su conducta de
vida. No califica el aprovechamiento del alumno por su capacidad de
memorizar el texto; enseña a pensar y a procesar lo que el texto
transmite como verdad científica y, sobre todo, forma hombres y mujeres
que, viviendo de la preparación, no de la corrupción, sirvan a una
sociedad mejor. En muchos casos, los profesores de hoy lo son más por
oficio y medio de vida que por vocación. Justo es decir que todavía en
todo el país se pueden encontrar ejemplos de autenticidad en maestros y
maestras como doña Celeste Hamilton, educadora por 56 años en Barahona,
haciendo de su vida una obra maestra para gloria de Dios. Celebremos hoy
el día de los verdaderos maestros, porque vivimos ya la sociedad del
conocimiento, en la que el conocimiento es capital, y la comprensión y
la aplicación del conocimiento sólo pueden impartirlas y repartirlas los
maestros que estudian y educan cada día.